El caso Gelman

El caso Gelman
* Alvaro Kröger


--------------------------------------------------------------------------------

Sé que escribir sobre este caso me traerá un sinnúmero de críticas, se me tachará de facho, anormal, se acordarán de mi madre, etc.

La base de este artículo no es acusar ni defender a los 6 militares que están bajo custodia esperando la resolución de extradición desde la República Argentina. No soy ni abogado, ni conozco el tema más que el común de los uruguayos, pero hay cosas que se deben decir aunque duelan y la mayoría de los ciudadanos critiquen.


A éstos 6 militares se los ha condenado sin juicio, y según nuestra jurisprudencia todos somos inocentes hasta que se pruebe lo contrario.

En este caso específico, la Presidencia de la República, lo sacó de la Ley de Caducidad. Las razones son oscuras. ¿Porqué se sacó de la Ley de Caducidad algo que es parte de una ley votada por el Parlamento y aprobada por un referéndum? ¿Es diferente Gelman a Helena Quinteros? En mi país, o sea éste Uruguay todos somos iguales frente a la ley.

Si sentamos precedentes de gente con "coronita", mucho mal le estamos haciendo a la democracia.

Esta Ley de Caducidad fue una solución muy inteligente de dos políticos con muchos kilómetros recorridos: Wilson Ferreira Aldunate y Julio María Sanguinetti. No la hicieron de caprichosos, la hicieron para calmar ánimos y cerrar un capítulo negro de la historia nacional.

Ahora sacan el caso Gelman de las generales de la ley y se vuelve a revolver algo que suponíamos que se venía calmando y solucionando.

Con la extradición a Chile de 2 militares y 1 policía por el caso Berríos, el problema es diferente porque el delito se cometió luego de 1984, y la Ley de Caducidad no ampara a éstos sujetos. Así que es totalmente válido el pedido chileno; además la Justicia chilena es tan ciega como la nuestra y no como la argentina que tiene la venda caída y un ojo mirando para un lado y el otro mirando a 90º.

Aceptar que éstos 6 militares sean juzgados en Argentina es darle al gobierno y en particular al volátil y cambiante titular del Ejecutivo hechos políticos que capitalizará para su perpetuidad en el Poder.

Y la Justicia argentina, si tiene algo particular es que no es justa; juzga según los estados de ánimo del Presidente y sus adláteres ya que los jueces NO son nombrados por sus méritos como juristas, sino según sus simpatías políticas.

El caso que se ventila es la muerte de una uruguaya nacionalizada argentina en 1976, que fue traída clandestinamente al Uruguay, y en la sede de la Side dió a luz a una niña, luego la mataron. Todo esto son las versiones periodísticas y no hechos comprobados por un juez. También suena un poco extraño el interés del poeta? Gelman, por su nuera sin interesarle aparentemente el destino de su hijo, también muerto.

Este caso es sin dudas, el típico caso de autopromoción gratuita de un oscuro escritor desconocido hasta que explota este filón que es el de los derechos humanos, que tan buen rédito le ha dado a muchos. Y como sigo la regla de oro de Maquiavelo de "Piensa mal, y pensarás correctamente", me pregunto si el interés por su nuera y el desinterés por su hijo del Sr. Gelman, es sólo por la desaparición física de una Irureta Goyena.

También aparece como dato curioso que la causa abierta en Argentina, que ha dado motivo a este exhorto, se titule solamente: "Videla y otros", sin hacer ninguna referencia a alguien en particular más que a Videla. Usando este tipo de criterios jurídicos si hay una causa abierta contra el Sr. Pérez van a tener que ir a declarar y posiblemente purgar penas todos los Pérez de la guía.

Otro tema a tener en cuenta es que si el crimen se cometió aquí, por conciudadanos, la lógica me indica que deben ser juzgados aquí y se hallaran culpables, cumplir las penas aquí.

Teniendo en cuenta el cúmulo de problemas que tenemos con Argentina, mandar a 6 militares para ser juzgados en Buenos Aires es condenarlos de antemano y además ya se les dictó la pena, sin siquiera haber pisado un juzgado: 25 años de cárcel.

Si bien me parece una aberración jurídica que algunos sean amparados por una Ley que refrendó el pueblo y otros no, porque el Poder político de forma inconsulta se le antojó eximirlos de esa ley el mal ya está hecho. Entonces para controlar los daños colaterales, la Justicia uruguaya debería no tener en cuenta el exhorto argentino (que seguramente debe estar plagado de inexactitudes), y juzgar a éstos militares aquí, por jueces uruguayos y de hallarse culpables, purgar las penas en cárceles uruguayas.

Creo que lo que debemos demostrar al mundo es: a) que las leyes son parejas para todos los ciudadanos; b) que por más Gelman o Menecucho que se sea no tiene más valor que cualquier ciudadano de la República; c) que no confiamos en una Justicia que es digitada por el poder político; d) que menos aún confiamos en la Justicia argentina que absuelve a delincuentes y condena a personas honestas; e) tampoco confiamos en una Justicia que hace más de una década está investigando los atentados contra la Embajada de Israel y la AMIA y todavía no tiene siquiera un sospechoso creíble.

Si la Justicia determina que éstos militares son culpables, deberán pagar sus culpas a la sociedad, aunque sean los chivos expiatorios de una situación política.


No digo que sean culpables o inocentes, ese es trabajo del juez, lo que me preocupa es que algunos son más "alguien" que otros, y eso para nuestra sensibilidad republicana y respetuosa de las leyes me hace rechinar los dientes.

Y para que nadie diga algo, la Constitución de la República lo dice claramente: "Todos los ciudadanos serán iguales ante la ley". En el período militar no lo fuimos, pero ahora estamos en democracia, y la base de la democracia es el respeto irrestricto a la Constitución, las leyes y los compromisos contraídos por el país.

"Freedom is not free", reza un proverbio americano; lo que en criollo quiere decir que si queremos libertad debemos luchar por ella y pagar un precio.