sábado, 7 de julio de 2007

La caballería de Sir Salam Rushide

" Soy encantado con él, " dijo Ian McEwan, cuando le dijeron que su amigo y novelista de jóvenes Salman Rushdie había sido armado caballero. " Él es un maravilloso escritor, y esto envía un mensaje firme a las editoriales , a la industria gráfica de libro y a sus apaciguadores. " Parecería que el mensaje fue oído demasiado claramente, y no sólo en Irán y Paquistán.

Este es el último de una larga lista de honores de la función del primer ministro Tony Blair , y esto no es el Palacio de Buckingham. Pero Downing Street, con alguna ayuda de los comités de elección llamados "los grandes y los buenos", " la deliberación de los mismos que además podría ser considerada grande y bastante buena, es la que decide quién será caballero y que cargará con ese honor por toda la vida.
Concediendo el título de caballería, el primer ministro saliente ha invitado a atacar otra vez a la "Islamofobia". Signifique lo que signifique eso, el verdadero el precio es, lo que seguramente hemos visto como un resurgimiento de la Salmanofobia, aquella otra fuerza poderosa de la edad, igual pero opuesta.
La respuesta a dado al honor recibido en Londres, así como en otras ciudades, nos recuerda que este hombre puede unir a musulmanes, nacionalistas conservadores y el intelectual académico de moda alejando el odio de él. Esta es una hazaña impresionante.
Hace pocos meses era la reina, en su " cumpleaños oficial " que, con el Año nuevo, es cuando son repartidos los nuevos títulos nobiliarios, según el grado, a personas a algunas probablemente y a otras improbablemente. Los honrados esta vez incluyeron a un antiguo capitán de la Armada de Inglaterra, la Dama Edna (o al menos Barry Humphries), cantante rock Joe Cocker, " y los fundadores de una conocida línea de ropa interior erótica inglesa, junto a Salman Rushide.

Él él mismo dijo que está " emocionado y humillado por recibir este honor, y está muy agradecido que su trabajo ha sido reconocido de este modo, " mientras que otros lo vieron como un endoso tardío o recompensador. El crítico y antiguo profesor John Sutherland piensa que por la vía de la apología de los que no han apoyado Rushdie claramente en su hora de necesidad hace 18 años.
" Es asombroso que Tony Blair, entre otros, ha estado tan poco dispuesto a ser visto sacudiendo la mano de Rushdie, y aquí él consigue un título de caballero de la Reina. "

Pero hay todavía muchos otros que no tienen ningún deseo en sacudir la mano de Rushdie, ni aún en sentido figurado. En la Casa del Islam, la reacción era todo lo predecible: " Salman Rushdie se ha convertido en un cadáver odiado, que no puede ser resucitado por ninguna acción, dijo Mohammad Reza Bahonar al parlamento en Tehran, donde el título de caballería fue denunciado con ira como una remota pero posible provocación. Para la "gente razonable", un orador llamó a la reina "una vieja arpía. "
Irán era, desde luego, el país donde el fatwa fue pronunciado sobre Rushdie por los ayatolás en 1989.
El título de caballería unánimemente fue condenado por el parlamento en Paquistán, "nuestro aliado supuesto , con la guerra del terror. "
Mucha Unión Jack fue quemada por aquellas zonas. (Como con las innumerables banderas danesas quemadas en países musulmanes cuando el asunto de las historietas, uno tiene que admirar el espíritu emprendedor de éstas acciones , la ofensa señalada en tales casos como una contingencia para tales acontecimientos.) En Islamabad, Robert Brinkley, el representante británico, fue convocado para ser reprochado " de la carencia completa de sensibilidad " en armar caballero a Rushdie. A su turno, él expresó la preocupación del gobierno británico en la reunión con el ministro de asuntos religioso Mohammad Ejaz ul-Haq que el título de caballero no podría podría justificar ataques suicidas bajo ningún concepto. El ministro más tarde "clarificó" ésto diciendo que él quiso decir podría parecer a algunos terroristas suicidas una justificación para inmolarse. Mejor así, de ésta forma los musulmanes están advertidos de que el título de sir no es algo tan significativo.
Todo esto este clamor, por llamarlo de alguna forma, muy familiar luego de la publicación de la novela de Rushdie "Los Versos Satánicos" hace 18 años, no llevó a situaciones muy dolorosas como ocurrió en aquel entonces. Hasta ahora, no hubo quemas de libros en las calles de Londres y Bradford, pero hubo bastante indignación.

Cuando Lord Ahmed fue hecho miembro de la Cámara de los Lores por Blair, él se fue alardeado como que era un voto moderado musulmán. Él pareció sólo parcialmente moderado cuando dijo por televisión que el "señor Salman Rushide" era un ultraje contra el Islam y que el gobierno debería haber armado caballero al periodista Robert Fisk en cambio. Hace dieciocho años, Fisk se burló de Rushdie - en un momento cuando peligraba de su vida - también lo hicieron políticos y comentaristas de la derecha.
Bastante seguro, en el "Daily Mail" hace unos días, Ruth Dudley Edwards volvió sobre este tema por compartir " pensamientos predominantes " sobre Rushdie: " Presumido, pretencioso, buscando atención e ingrato. "
Esto llevaría un ensayo largo para explicar por qué la derecha tiene tanta aversión a Rushdie ahora, aunque esto se remonte a un cuarto de siglo hasta sus días como el látigo autoproclamado del racismo postimperial británico.

Sutherland, su gran campeón, advierte que "Los Versos Satánicos" eran " sumamente groseros sobre Inglaterra, "y que lo hace el más asombroso es que " él ahora ha prometido el servicio personal del monarca! " (Una noción bastante inocentona de lo que se espera que un caballero haga hoy día.)
La eclosión del asunto de Los Versos Satánicos durante el Día de San Valentín en 1989 tomó a cada uno de improviso, y de verdad, como con el asunto de las historietas danesas, ello era realmente fáctico. Nunca habría pasado si algún fanático no hubiera robado un trabajo de ficción literaria, antes inaudita, en Tehran y así logró inflamar las pasiones de varios de los millones que no lo habrían leído jamás, y nunca leerían aquello o ninguna otra novela de algún tipo o color.

No es que Rushdie fuera, o sea, desvalido. Desde el primer momento, él valientemente fue defendido por escritores como Norman Mailer, que no lo conocía, pero todavía más por su grupo de amigos, el grupo literario más prominente en Inglaterra: McEwan, Martin Amis, James Fenton, Cristóbal Hitchens.
Ellos han hablado claro otra vez, y, uno podría decir, con la autoridad del éxito renovado:McEwan dentro de poco puede alcanzar la cima de la lista de bestseller de ficción del New York Times con su nueva novela sobre la playa Chesil, mientras Hitchens ya lo ha hecho a la cima de la lista de no ficción con su "El Dios ateo no es grande".
Hace pocos días, Hitchens apareció en las noticias de TV de la B.B.C., y dió un tratamiento de buldog fino, diciendo que ésto no era ningún asunto de estos pueblos remotos para decir quién debería o no tener el honor de servir al soberano.
Cuánto de este apoyo aprovechará Rushdie es otra asunto, y algunos de sus defensores parecen tener sus propias órdenes políticas. En 1989, el derecho xenófobo que conectó Rushdie fue personificado por Norman Tebbit, uno de los tenientes principales de Margaret Thatcher, que llamó a Rushdie " un bandido excepcional " y un hombre cuya " la vida pública ha sido un registro de todos los actos despreciables de traición en su educación,su religión, ha adoptado la ciudad y la nacionalidad. Ahora él traiciona al pueblo británico. "
Pero ahora hay un nuevo grupo de ardientes Anglo-neoconservadores: los partidarios de la alianza americana, la guerra de Irak, y la cruzada contra el "Islamofascismo" y quién se ha repuesto a la cabeza es Rushdie. Otro de ellos es Daniel Finkelstein, el redactor de comentarios y columnista de Times, que lleva una campaña para " Apoyar a sir Salman. " La decisión de honrarlo era " valiente y correcta, " dice el manifiesto de Finkelstein: Aparte " del mérito de su obra literaria, el autor es un símbolo del discurso libre. "
Esto es lo que McEwan dice también, con su " el mensaje firme en las hojas del libro y sus apoyos. " Si Rushdie realmente quiere ser reclutado como un soldado de a pie no puede, es un caballero , es un miembro de la orden ecuestre y en este choque renovado de civilizaciones es otro asunto.

Alvaro Kröger

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